Primeras experiencias con el Arte Visionario

No recuerdo con exactitud cuando descubrí el arte visionario, pero una de las primeras experiencias de verlo en persona fue en Australia. Ahí conocí a varios artistas, y tuve la posibilidad de conversar y compartir con varios de ellos. Uno de los primeros fue Kiro K  sus cuadros estaban relacionados al mundo de los elementales, mucha naturaleza y seres mágicos de la naturaleza. Luego tuve la mágica oportunidad de ver los cuadros originales de los comienzos de  Izzy Ivy, hermosos seres azules que siempre me había imaginado, ahora estaban ahí.

 

En los “Doof” vi a varios artistas pintar en vivo. No se como transmitirles la esencia de ese momento, pero lo intentare, era como vivir un sueño, una música electrónica exquisita, armoniosa, alegre, luminosa, mágica, acompañada de luces y mapping que hacían sentir vivo el bosque, mientras muchas personas vestían como salidos de un cuadro visionario y de la propia naturaleza. Era una misticidad donde la oscuridad se sentía amena, era una curiosidad que sientes el anhelo de saber más, qué hay detrás del velo, me convertí en una completa observadora por varios meses.

Estas hermosas almas de la noche eran los mismos seres que veía de día en las ferias artesanales o en la playa, o en el café, daba lo mismo el lugar y la hora, eran siempre los mismos, mágicos.

 

Terminé teniendo muchos amigos, era una más de ellos, me había fusionado con su esencia,  y eran mi familia, mi familia cósmica como le llaman. 

 

Fue como vivir en cuento de hadas, estaba lleno de seres espirituales y conscientes, la mayoría vegetarianos, full reciclaje, muchos de ellos se expresaban a través de las artes, y en vestimentas. Era como vivir dentro de un cuadro visionario. Siento que este arte, saca el velo de la Matrix, el arte visionario y quizás aún más las personas que son como salidas de un cuadro, esas personas que tramiten luz y esperanza en su simple caminar, son tanto o más potentes influencias a la expansión de la conciencia y fe en el mundo.

 

Siento que al ver a estas personas, solo el hecho de ser y estar, influenciaron mi vida positivamente y efectivamente más que una experiencia con ayahuasca.

 

De vuelta en Chile, quería saber más, experimentar más intensamente la vida, por lo que me fui a la selva con la intención de probar la ayahuasca, tener super magníficas visiones que me harían pintar como los cuadros que había visto.

 

Corta historia, tomé y la verdad es que no vi mucho como pensé que iba a ver, tuve más experiencias fuertes, oscuras y luminosas. Gracias Dios, al gran espíritu o como sea que le llames tú a esa energía Divina que nos permite estar vivos, Gracias a ella que, cuando toque fondo, y me sumergí en las tinieblas conocí a un grupo de seres de luz hermosos que me asistieron y explicaron muchas de las cosas que viví. Esto me hizo entender el mundo espiritual y las energías,  y aprendí a no jugar con ellas y usarlas con respeto y sobre todo mucho amor.

 

Ya con tanta información, en mi viaje de regreso, en Pisac, Cuzco, Valle Sagrado, pinte uno de los seres de luz que vi, no en mi alucinación, si no los seres humanos que conocí en mis viajes, terrenales, y carnales. Simples, del aquí y el ahora.

 

No se cual de todas mis etapas de mi vida me hizo ser tan sensible, aunque siempre lo fui, siempre lo hemos sido, solo que lo hemos olvidado, por lo que creemos de que se trata la vida, todos nos olvidamos de vez en cuando, pero siempre estará ahí adentro, y nunca lo perderemos porque es parte de nuestra más profunda esencia.

 

La naturaleza y el amor es la más grande conexión con el gran espíritu, la más leal y trascendental, y una vez que haces la conexión, te haces consciente de ello.

Es fácil volver a olvidar, caer de nuevo en la matrix, pero siempre habrá señales que te harán recordar, que eres un ser espiritual teniendo una experiencia humana.

 

Es por eso que una de las tantas cosas por las que me gusta pintar y expresarme incluso a través de estas palabras, es porque siento que compartir nuestras experiencias quizás le pueden hacer recordar a otros, y ayúdanos en algún aspecto de nuestras vidas, así como a mi me ayudaron tantos otros artistas que sin querer queriendo influenciaron mi activación  conciencia.

 

El arte visionario, es para mi es una hermosa herramienta que se liga mucho al mundo espiritual, a lo que no se puede ver, pero si sentir, para expandir la mente y el corazón.

Pintar para aportar a la memoria del buen vivir, presentes, en contacto con la naturaleza, experimentando el elixir de la vida misma, los altos y bajos, aceptando que todo tiene su proceso, nada es bueno si malo, las cosas son, todo es perfecto y sea cual sea el  camino que tomemos, siempre será el perfecto y necesario para nuestra evolución.

Ya que todos los caminos llegan a roma, amor.

 

A veces creemos que ya lo sabemos todo, pero no, hay cosas ocultas que solo veremos si estamos atentos, solo veras lo que vibre en su frecuencia, el proceso de aprendizaje nunca termina porque la vida es una constante evolución, estamos todos en el mismo espiral, humanos y todos los seres que lo habían, muchos que conocemos y otros que aún no. Pero lo que si se, es que aunque a veces sea compleja y dura la vida, siempre es para ser cada vez mejores y evolucionar, JUNTOS, por eso es que si tengo la posibilidad de ayudar, lo hago, porque sé que somos uno.